Zaragatona, un laxante natural muy eficaz

La zaragatona es una planta típica de la zona occidental del Mediterráneo, muy común en España y Marruecos.

Sus semillas están recubiertas por una cascarilla rica en fibra y mucílagos que tiene múltiples beneficios en nuestro organismo.

Gracias a su fibra que gelatiniza cuando entra en contacto con el agua, la cáscara de zaragatona resulta ser uno de los laxantes indoloros naturales más eficaces.
También actúa contra la diarrea leve pues en el tracto digestivo, la zaragatona absorbe el exceso de líquido y ayuda a que las heces se endurezcan.

La fibra de la cáscara de zaragatona es soluble, por lo que ésta nos ayuda a reducir los niveles de glucosa en la sangre y el colesterol malo.

Además, al producir una gran viscosidad cuando se hidrata, la cáscara de zaragatona resulta ser un gran antiinflamatorio del tracto digestivo ya que lo lubrifica.

En las dietas de adelgazamiento también es muy recomendable consumir zaragatona ya que una vez llega al estómago, ésta produce sensación de saciedad y disminuye la ansiedad que producen las ganas de comer.

Aplicada sobre la piel, la zaragatona ayuda a cicatrizar heridas, quemaduras leves, úlceras, etc.

Uno de los usos culinarios más sorprendentes de la cáscara de Psyllium es que ayuda a mejorar la calidad de los panes sin gluten, aportándoles esponjosidad y elasticidad.
Se debe tener en cuenta que la cantidad de zaragatona a usar variará según la receta de cada tipo de pan.

Cómo tomar la zaragatona

Para el estreñimiento recomendamos tomar una cucharada de cáscara de zaragatona mezclada con un vaso de agua, en infusiones, en zumos, yogures, etc. Esta mezcla la podemos tomar en ayunas y si fuera necesario también la tomaríamos por la noche.

Para uso tópico debemos mezclar unos 20 g de cáscara de zaragatona en un vaso de agua y dejar macerar 12 horas. Pasado este tiempo lo aplicamos sobre la piel.

En Casa Perris tenemos disponilbe la Zaragatona (también Psyllium husk o Plantago ovata)