Descripción
La soja destaca su contenido de proteínas de buena calidad, superado incluso el aporte proteico de las carnes. Su elevado aporte de fibra contribuye a prevenir o aliviar el estreñimiento,. Contiene, además, lecitina un tipo de grasa que se emplea como complemento dietético. En comparación con el resto de legumbres, la soja aporta mayor cantidad de minerales como calcio, hierro, magnesio, potasio y fósforo, y cantidades apreciables de vitamina E, folatos y otras vitaminas del grupo B. Asimismo, cabe destacar su aporte en isoflavonas.
La proteína de soja en polvo es la proteína vegetal más cercana a la de la carne y cuenta con alta cantidad de aminoácidos. Nuestro producto ofrece la mínima cantidad de grasas y carbohidratos y no contiene lactosa. Es la elección perfecta para vegetarianos, y personas con dietas específicas que no toleran la lactosa.
La proteína de soja media es la que encontramos en trocitos más pequeños que pueden parecernos cereales. Son trocitos pequeños y de forma irregular de aspecto fibroso y esponjoso, aunque deshidratados. Pueden comerse directamente porque tienen un sabor dulzón y suave y una textura crujiente.
Nosotros aconsejamos a nuestros clientes ponerla primero a remojo, en agua templada a remojo, hasta que se reblandezca.
Este tipo de soja de grano medio no se apelmaza, los granos no se pegan entre sí. A diferencia de la proteína de soja en polvo, deberemos mezclarla con harina o otros aglomerantes si queremos tratarla cómo si de carne picada fuera.
Al igual que la proteína de soja en polvo, podemos rellenar canelones, pimientos, verduras, o elaborar hamburguesas o albóndigas o deliciosas salsas.